QUIROMANCIA

Quiromancia es la adivinación a través de la lectura de las líneas de la mano.

El término deriva del griego χείρ (khéir, "mano") y μαντεία (manteía, "adivinación"). Es una rama de la quirología y se centra en el estudio de las líneas y montes que se hallan en las palmas de las manos que, por medio de la observación, revelan supuestamente el perfil psicológico y fisiológico de una persona.

Aunque suele ir íntimamente ligada a la adivinación y a las ciencias ocultas, siempre ha existido una cierta aceptación popular. Actualmente es criticada como una seudociencia. Comúnmente, la práctica de la quiromancia se denomina leer la mano o leer las manos, aunque también se conoce como echar, leer o decir la buenaventura.

ADIVINACION

Se suele decir que en las manos se puede conocer el destino de una persona y adivinar sucesos pasados, presentes y futuros. Si bien no es posible afirmar rotundamente hasta qué nivel de detalle se pueden predecir sucesos, sí que podemos intuir, gracias al perfil psicológico de una persona que supuestamente podríamos observar en sus manos, cómo va a actuar en una situación concreta.

Según la quiromancia el destino se puede leer en las palmas de las manos por representación de predisposición genética: del mismo modo que está comprobado que una persona puede estar predestinada a padecer ciertas patologías en el futuro, también podría ser posible saber cómo evolucionará su comportamiento a lo largo de su vida, aseguran.

Sin embargo resulta más difícil si cabe comprender y explicar de forma científica la premonición de sucesos externos a través de la quiromancia, puesto que ello se aleja de la base genética plausible que sostienen los que practican la quiromancia. Por ejemplo, es a priori científicamente inverosímil el poder asegurar con rotundidad, como hacen algunos quiromantes, qué números de lotería acertaremos a través de nuestras manos.

En su estudio sobre la historia de las técnicas adivinatorias, el ensayista italiano Giordano Berti cita las siguientes palabras de Leonardo da Vinci:

 

·        "Sulla fisionomia e sulla chiromanzia non mi dilungherò, perché in loro non c'è verità (...). Tu troverai grandissimi eserciti morti in una medesima ora di coltello, e nessun segno della mano è simile l'uno all'altro".

·        "En base a la fisonomía y la quiromancia, no voy a ir, porque no hay verdad en ellos (...). Usted encontrará grandes ejércitos muertos en un cuchillo al mismo tiempo, y ni rastro de la mano es similar a uno del otro" .

Las líneas de la mano

El estudio de las líneas se lleva a cabo normalmente en la mano izquierda, sea cual sea la mano dominante. La mano debe estar abierta con la palma a la vista. Dichas líneas se dividen en dos grupos: las líneas mayores y las menores. Existen 3 líneas mayores y numerosas líneas menores que no siempre aparecen en su totalidad.

Los quiromantes

Antiguamente, la quiromancia era un rito pagano, como todos los ritos de adivinación. Los que la practicaban eran acusados de brujería y perseguidos por la Santa Inquisición.

En la actualidad, la práctica de la quiromancia, o de la quirología en general, suele estar acompañada de la lectura del tarot y otras prácticas esotéricas. Se pueden encontrar quiromantes con consultas privadas y altos precios por el estudio de la mano, como quiromantes instalados en zonas céntricas de las ciudades con gran afluencia de peatones que practican la quiromancia y otras artes esotéricas a cambio de la voluntad del cliente.

Críticas

La quiromancia es considerada como una pseudociencia aunque más relacionada con conceptos como magia poderes parapscilógicos y otras suertes adivinatorias, por la comunidad científica al no cumplir con los requisitos básicos del método científico. Es decir, no ha superado las pruebas necesarias para ser considerada aceptable científicamente. Hay poca investigación que acepte la verificación de la precisión de la quiromancia como un sistema de análisis y mucha de ésta ha sido llevada a cabo por los propios quiromantes. Por otra parte, el mago y escéptico James Randi ofrece un premio de un millón de dólares a cualquiera que logre demostrar fehacientemente la existencia de un fenómeno o poderes paranormales -incluyendo el tipo de eventos como los que se ocupa la quiromancia- pero el premio está desierto desde que se ofreció.                                                                                                                                                                                          

                                                                   Luigi